Amélie Ducomunn crea atmósferas de memorias, lugares y espacios recorridos a través de los recuerdos. Su trabajo se convierte en refugio frente a un mundo donde todo es rápido y frenético y donde estos ritmos nos llevan a perder de vista nuestra naturaleza esencial y el tiempo de vida que se nos ha concedido. Su pintura es un encuentro armónico entre líneas y colores que generan paisajes idílicos donde los recuerdos se entretejen en un caos majestuoso entre el pasado y el presente.